Prostatectomía en Panamá
Hoy en día, el 25% de los hombres en edad avanzada desarrollan enfermedades prostáticas; y en la mayoría de los casos, la prostatectomía se convierte en una alternativa eficaz y definitiva.
¿Qué es la prostatectomía?
La prostatectomía o extracción de la próstata, es una intervención quirúrgica que se realiza con la finalidad de extirpar una parte de la glándula prostática o su totalidad. Este procedimiento forma parte del tratamiento de algunas enfermedades que la afectan, entre ellas el cáncer de próstata o la hiperplasia benigna prostática.
Sin duda es un procedimiento bastante común que ha venido evolucionando a lo largo de los años, siendo posible en la actualidad realizar una prostatectomía mediante cirugía tradicional o aplicando técnicas de cirugía robótica mínimamente invasiva.
¿Por qué se hace la prostatectomía?
En primer lugar, esta intervención se realiza en pacientes oncológicos cuando el cáncer se ha diseminado más allá de la próstata. Puede combinarse con otros tratamientos como radiación, quimioterapia o terapia hormonal según lo determine el médico tratante, para obtener mejores resultados.
En esta intervención no solo se extirpa la glándula prostática; también se abordan los ganglios linfáticos circundantes, para evitar recurrencia del tumor.
Sin embargo, no es un tratamiento exclusivo para el cáncer. Los pacientes con hiperplasia benigna de próstata pueden ser elegibles para este procedimiento, siempre que el especialista así lo determine.
Procedimiento quirúrgico de la prostatectomía
En particular, el cirujano puede recurrir a diferentes técnicas para realizar una prostatectomía:
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- Prostatectomía asistida por robot. Emplea las mejores técnicas de la cirugía tradicional, pero asistidas por un mecanismo automatizado. Para ello, el cirujano realiza varios orificios pequeños (máximo de 1 cm cada uno), para poder introducir instrumentos especiales que moverá desde el exterior guiándose por un sistema de visualización en alta definición.
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- Prostatectomía radical abierta. Por lo general, se realiza una incisión en la parte baja del abdomen o entre el recto y la base del pene, luego de haberse administrado anestesia general o raquídea. No obstante, es una técnica que ha perdido vigencia, y actualmente solo se practica cuando existe una condición especial; como una glándula prostática muy agrandada o divertículos vesicales.
Básicamente, el periodo de duración de la cirugía se ubica entre 2 y 4 horas. El cirujano inicia con una incisión quirúrgica en la parte baja del abdomen (debajo del ombligo) hasta la parte superior del hueso púbico; o de forma horizontal, justo encima del mismo hueso. Luego se procede a abrir la vejiga y extraer la glándula prostática.
Por lo general, el cirujano extirpará solo la parte interna de la glándula y luego sutura la cubierta externa. Del mismo modo, se deja un drenaje en el abdomen para eliminar los líquidos producidos luego de la intervención, se coloca una sonda o catéter en la uretra para evitar el llenado vesical y permanece hospitalizado de 2 a 4 días.
¿Cómo prepararse para una prostatectomía?
Antes de programarse la cirugía, el especialista solicitará hacer una cistoscopia para visualizar dentro de la vejiga y la uretra, comprobar el tamaño de la glándula y revisar las condiciones del sistema urinario.
De igual manera, es preciso hacer exámenes de sangre, verificar flujo de orina y pruebas de medición de la próstata.
Durante este tiempo, también se establecen ciertas pautas que se deben poner en práctica antes de la intervención, entre ellas:
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- Tener control sobre cualquier posible condición del paciente: Hipertensión, diabetes, problemas del corazón o pulmones…
- Se recomienda dejar de fumar varias semanas antes de la intervención.
- Indicar al equipo médico los suplementos, vitaminas y medicamentos que el paciente consume; incluyendo aquellos medicamentos comunes que puedan haber sido tomados sin receta médica.
- Si recibe tratamiento con anticoagulantes, seguramente será suspendido de manera temporal.
- Deberá tomar un laxante la noche anterior, para poder expulsar todos los contenidos del colon.
- No comer ni beber nada luego haberse laxado; solo puede tomar un pequeño sorbo de agua para controlar la sed.
Cuidados posteriores a una prostatectomía
Después de la cirugía, es necesario que el paciente de prostatectomía no realice ninguna tarea que implique esfuerzos durante al menos un mes.
Entre las recomendaciones que debes seguir para una correcta recuperación, se citan:
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- Un familiar, amigo o cuidador profesional debe asistirte con las tareas cotidianas, al menos durante varios días.
- Debes mantener control de todos los medicamentos indicados para aliviar el dolor, evitar infecciones o estreñimiento.
- Mantén al alcance de tu mano el número del equipo médico por si se presenta algún nuevo síntoma o complicación.
- Evita alimentarte con comidas sólidas. Lo recomendable es una dieta blanda con alto valor nutritivo.
- Procura hacer ejercicios de respiración profunda varias veces al día. Esto te ayudará a relajarte y bajar un poco el estrés.
- Antes de volver a la rutina diaria, consulta con tu médico tratante para que lo autorice.
- Usa medias especiales de compresión.
Posibles efectos secundarios
Evidentemente, toda intervención quirúrgica implica riesgos, pero la prostatectomía también puede causar efectos secundarios muy marcados. Algunos de ellos son:
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- Puedes necesitar alguna transfusión sanguínea por el abundante sangrado que se produce durante una prostatectomía abierta.
- 5 de cada 100 hombres puede padecer problemas de disfunción eréctil luego de haber sido intervenido.
- Infecciones recurrentes en las vías urinarias.
- Estrechamiento de la uretra o del cuello de la vejiga.
- Incapacidad de retener la orina de manera parcial o total (incontinencia).
- Eyaculación retrógrada (es decir, dentro de la vejiga y no a través del pene). Aunque esto no produce un síntoma o daño evidente, causa problemas de fecundidad.
- Orgasmo seco.
¿Cuánto cuesta una prostatectomía en Panamá?
Si deseas practicarte una prostatectomía, los costos asociados varían según la técnica a emplear.
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