Hiperplasia Benigna de Próstata
Hiperplasia Benigna de Próstata: síntomas, diagnóstico y tratamiento
Una de las estructuras que forma parte del aparato reproductor masculino, es la glándula prostática; la cual rodea la uretra y se ubica justo debajo de la vejiga. Básicamente, la próstata, junto a las glándulas seminales; se encarga de la producción del semen que permite el normal desenvolvimiento de la función sexual.
Por otra parte, esta glándula que normalmente tiene el tamaño de una nuez, comienza a crecer en la medida que el hombre avanza en edad; provocando alteraciones urinarias que se van manifestando alrededor de los 50 años.
¿Qué es la hiperplasia benigna de próstata?
También se conoce como hiperplasia prostática o agrandamiento de la glándula prostática; y no es más que el crecimiento progresivo de la próstata, conforme avanza la edad del paciente. En consecuencia, la masa de tejido hiperplásico comienza a comprimir la uretra, provocando obstrucción urinaria y un vaciado incompleto de la orina.
A partir de ese momento, el individuo comienza a presentar ciertos problemas urinarios que además de molestos, pueden ocasionarle alarma; ya que éstos coinciden en buena medida con los signos del cáncer de próstata. Sin embargo, no existe una relación entre ambas enfermedades.
Síntomas
Entre los síntomas más frecuentes de la hiperplasia benigna de próstata, se pueden citar los siguientes:
- Dificultad para iniciar la micción.
- Micción frecuente.
- Incontinencia urinaria.
- Necesidad de orinar con más frecuencia durante la noche (nicturia).
- Necesidad urgente de orinar.
- Flujo débil o goteo al orinar.
- Micción dolorosa.
- Sensación de vaciado incompleto.
- Eventualmente, puede presentarse sangrado en la orina (hematuria).
diagnóstico
Tan pronto como se presenten los síntomas y acudas con el especialista; el médico iniciará con la entrevista de rigor y seguramente pasará a hacer un examen físico, apoyado en los siguientes estudios:
- Tacto rectal.Es uno de los métodos más confiables para palpar el tamaño de la próstata y detectar cualquier cambio en sus dimensiones. En este sentido, un dato básico es que las zonas endurecidas pueden indicar cáncer; mientras que una próstata hiperplásica no es dolorosa.
- Análisis de laboratorio (muestras de sangre y orina).A través del análisis de las muestras, será posible conocer en qué condiciones se encuentra el aparato urinario en general, descartar infecciones e incluso problemas renales. Además, se solicita el examen de antígeno prostático específico para conocer los niveles de esta sustancia.
De la misma manera, existen algunas pruebas adicionales que deben ser incluidas para la detección de la hiperplasia benigna de próstata, conocer que tan recrecida se encuentra la glándula o descartar cualquier otra enfermedad:
- Citoscopia.
- Pruebas especiales de orina.
- Prueba de flujo de orina (flujometría).
- Ecografía transrectal.
- Estudios urodinámicos.
- Biopsia de la próstata.
TRATAMIENTO
En primer lugar, hay que aclarar que no en todos los casos se requerirá un tratamiento específico; ya que es posible que exista una próstata recrecida que no provoque problema alguno. De igual forma, es probable que tan solo reducir o eliminar la ingesta de algunos fármacos (entre ellos ciertos antihistamínicos y antidepresivos) pueda controlar las molestias.
Sin embargo, entre las opciones de tratamiento para la hiperplasia prostática se encuentran:
- La terapia farmacológica presenta diferentes opciones que pueden ser administradas de forma individual o haciendo una combinación de medicamentos; lo importante es que todo esto solo debe ser administrado bajo indicación y estricta vigilancia de un especialista.
- La cirugía convencional, llamada prostatectomía abierta; que amerita el ingreso hasta la glándula prostática desde el abdomen del paciente.
- La alternativa quirúrgica mínimamente invasiva; que viene a ser una opción que ofrece mejores probabilidades de obtener resultados satisfactorios, sin cortes ni suturas. Sin embargo, existe una variedad de técnicas que pueden practicarse:
- Resección transuretral de próstata.
- Terapia transuretral por microondas.
- Ablación transuretral con aguja.
- Terapias con láser.
- Terapias con vapor de agua.
¿Cuáles son las posibles complicaciones del paciente con hiperplasia benigna de próstata?
Tan pronto como se presenten los síntomas y acudas con el especialista; el médico iniciará con la entrevista de rigor y seguramente pasará a hacer un examen físico, apoyado en los siguientes estudios:
- Retención urinaria. Es un problema que puede llegar a presentarse si se cierra completamente el flujo de orina, a consecuencia de la presión provocada por el tejido hiperplásico. En estos casos, se debe introducir una sonda en la vejiga para drenarla.
- Infecciones urinarias. La acumulación constante de orina en la vejiga, aumenta el riesgo de infecciones; un problema que a su vez puede derivar en otras complicaciones.
- Litiasis vesical. La presencia de cálculos en la vejiga, por lo general tiene que ver con el vaciado incompleto de su contenido.
- Daños en riñón y/o vejiga. Estos órganos pueden sufrir a consecuencia de las infecciones repetitivas y/o la retención urinaria.